domingo, 3 de abril de 2011

Fotos y mapas

Avance Alemán hacía el Don, camino de Stalingrado; entre el 24 de Julio y el 18 de Noviembre.


Soldados alemanes en mitad de las ruinas de Stalingrado
En su retirada, los rusos cumplen la orden de Stalin
de dejarle sólo tierra quemada a los alemanes.

Bajas civiles, militares y consecuencias para el Reich


Oficialmente 91.000 fueron los prisioneros de la batalla final de la Ciudad de Stalingrado; de estos muy pocos estaban vivos para el comienzo de la primavera (solo 5.000 a 6.000 alemanes sobrevivieron hasta el fin de la guerra) debido a epidemias de disentería y de tifus entre los prisioneros.
Las consecuencias de esta catástrofe fueron inmensas y de gran alcance. Por primera vez, Alemania perdía la iniciativa de la guerra y tenía que colocarse a la defensiva. De hecho la Wehrmacht carecía ya de los elementos logísticos necesarios para avanzar más hacia el este y las orillas del Volga fueron precisamente el punto más oriental alcanzado por tropas alemanas en Europa. Después de esta batalla la Unión Soviética surgió engrandecida y con la iniciativa de la guerra que la asolaba en las manos de sus líderes.
Además, el comandante de la Luftwaffe, Hermann Göring, cayó en desgracia ante Hitler perdiendo crédito entre la élite del régimen nazi así como prestigio entre los militares, al no poder cumplir la orden de abastecer por aire a las fuerzas alemanas cercadas, como había prometido.
El III Reich perdió todo el 6° Ejército y parte del 4º Ejército Panzer, e incontables recursos materiales que no se pudieron reemplazar con la misma facilidad con que la URSS podía con sus propias bajas (aún más terribles incluso que las alemanas). De hecho, entre muertos, heridos y prisioneros la Wehrmacht había perdido más de 300.000 combatientes, muchos de ellos experimentados, que serían muy difíciles de reemplazar en poco tiempo
Los soviéticos, aparte de recibir una ciudad prácticamente destrozada, habían sufrido un millón de muertos civiles y más de 1.000.000 de bajas militares. De estos, unos 13.000 habían muerto ejecutados por sus propios compatriotas, acusados de cobardía, deserción, colaboracionismo, etc. Cabe destacar que no fue hasta la caída de la URSS que los historiadores rusos pudieron discutir abiertamente las cifras de bajas de la batalla, que si bien nunca serán exactas (debido a la ausencia de registros fiables y la proliferación de fosas comunes no contabilizadas), de hacer cálculos reales lo más probable es que el costo de vidas de todas maneras sea increíblemente alto y rebase los dos millones de individuos, resumiendo aquella frase de los generales rusos «El tiempo es sangre».
Según el cálculo más alto, si se incluyen a todas las fuerzas que pelearon en el Volga, murieron o fueron heridos 850.000 soldados del Eje y mas de 1.000.000 de soldados soviéticos (incluyendo prisioneros muertos en cautiverio y heridos muertos tras ser evacuados) y cerca de 2.000.000 de civiles rusos encontraron su fin (incluyendo refugiados y gentes que vivían en pueblos y ciudades donde también se combatió). El número total de muertos fue de hasta 2 millones.

Redención de Hitler


Se impuso un riguroso racionamiento para intentar pasar el invierno. Paulus, quien era admirador incondicional de Hitler, se dio cuenta que para el Führer el 6° Ejército, o lo que quedara de él, era poco menos que una pieza sacrificable en el juego de la guerra. La vida de los soldados no tenía la menor importancia para él.
El 25 de diciembre, en el Kessel, murieron 1.280 soldados de frío y hambre. Para el año nuevo, los rusos montaron una serie de cocinas y realizaron fiestas en la orilla sur del Volga con el doble objetivo de celebrar el año y mortificar a los alemanes cercados.
El 8 de enero los soviéticos realizaron un estrechamiento del perímetro y capturaron el único aeródromo que servía de conexión con el mundo exterior, Pitomnik: los alemanes tuvieron que reconstruir el de Gumrak gravemente dañado por ellos mismos para poder seguir recibiendo noticias. El 9 de enero se presentaron dos oficiales del Ejército Rojo en la línea occidental del frente alemán con un ultimátum de la Stavka para Paulus. Si dicho ultimátum no se aceptaba, los soviéticos lanzarían una ofensiva final contra el Kessel al día siguiente. El ultimátum fue rechazado. Las penurias se multiplicaron en el 6° Ejército Alemán, las epidemias diezmaban los soldados, la disciplina ya no existía y el hambre era tan atroz que los alemanes sacrificaron caballos, perros y ratas para poder alimentarse. Cabe destacar que aun en estas penosas condiciones, la resistencia del 6° Ejército continuaba, ya que las líneas del frente se retiraban combatiendo e infligiendo bajas a los rusos que ejecutaban el plan anillo para acabar con los alemanes.
El 28 de enero Paulus trasladó el cuartel general hacia los sótanos del Univermag y allí se hacinaron unos 3.000 heridos de diversa consideración, enfermos de tifus, paratifoidea y disentería. Los casos graves o que requerían cirugía prolongada eran colocados afuera para que murieran de frío.
Un aviso le llegó el 30 de enero de parte de Hitler a Paulus: le sugería que se suicidara ya que le había nombrado Mariscal de Campo y bajo las órdenes de Hitler ningún Mariscal se podría entregar vivo al enemigo. Un tanque ruso se acercó al cuartel general de Paulus, en el que venía un intérprete que había sido enviado por Paulus, el mayor Behr. El 31 de enero por la mañana, Paulus se rendía con cerca de 90.000 soldados, los restos de un ejército de 250.000 hombres. Sólo volvieron a Alemania 5.000 supervivientes. Se convirtió en el primer mariscal que capitulara en la historia alemana, desobedeciendo así a Hitler, atenazado por las tropas soviéticas, la falta de alimentos y el frío polar de la estepa rusa, para el que sus tropas no tenían material suficiente en un gesto sin precedentes en la Wehrmacht. El 2 de febrero se rindió el último grupo de soldados alemanes en los escombros de la fábrica de tractores Octubre Rojo, y es la fecha en la que terminó oficialmente la batalla.

Operación Urano

Para octubre, Hitler y sus comandantes cayeron en la cuenta de que no podrían tomar la ciudad en otoño. El invierno se aproximaba, por tanto se hicieron todos los arreglos para pasar allí el más crudo de los inviernos, en recuerdo del terrible invierno anterior. Para fines de octubre se dejaron sentir las enfermedades en el soldado alemán: paratifoidea, tifus, disentería, empezaron a hacer estragos.

A fines de octubre los alemanes se enteraron por medio de prisioneros de que los rusos preparaban una gigantesca contraofensiva. Ellos mismos habían notado los movimientos en sus flancos. Para protegerse, Paulus había levantado una barrera en su flanco izquierdo para prevenir los ataques procedentes por el norte, sirviéndose de las unidades rumanas, italianas y húngaras.

En efecto, el alto mando soviético preparaba una gran ofensiva dirigida a esos flancos y se estaba acumulando cerca de 1.700.000 hombres, es decir, cerca de 200 divisiones, la mayoría siberianas, además de carros de combate y cañones procedentes de Moscú y los urales.

Llegó el invierno con sus nevadas y la ciudad quedó sumida en un manto blanco con temperaturas que rondaban los -18 °C. Los combates callejeros cesaron casi por completo durante la noche.

De noche, los grupos enfrentados hacían señales de tregua temporales con banderas que asomaban en los orificios de las ruinas. Y se permitía tácitamente retirar algunos caídos en la tierra de nadie, y además se realizó un intercambio no oficial de abastos entre pequeños grupos de ambos bandos, realizado muy a escondidas en treguas concertadas espontáneamente. De ser sorprendidos por la oficialidad, la ejecución era inmediata por confraternizar con el enemigo. De día, la lucha se reanudaba.

El 19 de noviembre de 1942, los 3.500 cañones rusos comenzaron a machacar despiadadamente las líneas enemigas más débiles entre Serafimovih y Klestkaya, entre la nieve y la bruma mortecina del paisaje. Al son de trompetas, los obuses y Katiushas se dejaron caer en el sector rumano. Después de una hora de martilleo, los batallones de fusileros avanzaron sobre las filas de rumanos e italianos. Los rumanos del II y IV Cuerpos pudieron contener bravamente las primeras oleadas de atacantes y luego fueron arrasados por carros de combate T-34 hacia el mediodía. Cuando los fortines fueron demolidos, los rumanos echaron a correr por la planicie blanca, siendo perseguidos por las oleadas siberianas. Los Stukas acudieron al lugar del desastre y ya nada se pudo hacer, salvo ametrallar a los fusileros rusos. El desastre era total, el VIº Ejército de Paulus quedó encerrado en Stalingrado con unos 250.000 hombres y sin suministros mayores.

Operación azul (Fall Blau)

A finales de 1941, las fuerzas alemanas sufrieron sus primeros reveses.  La primera contraofensiva soviética hizo tambalear el frente alemán y el invierno se encargó de cerrar las puertas de Moscú.  No con poco esfuerzo, los alemanes lograron detener la arremetida soviética, pero cada día que pasaba se palpaba que era imposible reiniciar el asalto de la capital rusa al menos mientras durara el invierno.  Sin embargo, los alemanes lograron consolidar el frente.  Al llegar la primavera nuevos planes de batalla crearon la ilusión de que sería posible reanudar la ofensiva pero coordinar un plan de ataque de los tres frentes alemanes, Norte, Centro y Sur era una utopía.  Sólo durante el invierno las fuerzas alemanas perdieron un millón de hombres en combate y medio millón más debido a las enfermedades y el congelamiento.   Para reemplazar las bajas, los mandos alemanes recurrieron a sus aliados que aportaron divisiones rumanas, húngaras e italianas.  Pero Hitler decidió que el nuevo ataque debería enfocarse en el Grupo de Ejércitos Sur con los objetivos de capturar los yacimientos petrolíferos del Cáucaso, las industrias de la cuenca del Donets y los campos de cereales de Kuban.
Los planes originales llevaron el nombre de Operación Siegfried, pero cuando fueron revisados a la luz de los fracasos para ocupar Moscú, el nuevo nombre escogido fue Operación Blau (Operación Azul) que fue ordenada por Hitler mediante la Directiva No 41 del 5 de abril de 1942.  La operación consistía de varias fases:
Fase 1.  El ala norte del Grupo de Ejércitos Sur realizaría un movimiento de pinzas para encerrar las fuerzas soviéticas al oeste de Voronezh.
Fase 2.  Una vez cerradas las pinzas en Voronezh, las fuerzas girarían al sur en dirección a Millerovo para unirse a las fuerzas alemanas al este de Kharkhov.
Fase 3.  Una vez combinadas las fuerzas del Grupo de Ejércitos Sur, se dirigirían hacia Stalingrado para encerrarla en un movimiento envolvente.
Fase 4.  Una vez embolsada Stalingrado, el grueso de las fuerzas del Grupo de Ejércitos Sur se dirigirían al Cáucaso con un grupo dirigiéndose a Rostov y otro grupo dirigiéndose a Crimea.

La URSS en la Segunda Guerra Mundial hasta Stalingrado

El 23 de agosto de 1939, Stalin firma el pacto de No Agresión entre Alemania y la Unión Soviética que contenía una cláusula secreta mediante la cual Stalin esperaba ganar territorios en Polonia y con ello la concesión, por parte de Hitler de una "esfera de influencia" en Europa Oriental.  El acuerdo y la cláusula secreta dejaban sentado que habría una guerra contra Polonia y que ambos países ocuparían la mitad del territorio desde las fronteras de 1939.  Por otro lado, garantizaba la desaparición del estado polaco, una aspiración de Stalin luego de la última guerra ruso-polaca, que los polacos ganaron y más tarde con el Tratado de Versalles, les aseguró su independencia de Rusia.
Una vez que Alemania invadió Polonia y ocupó la parte de que le correspondía, el 17 de setiembre de 1939, comenzó la aplicación de la cláusula secreta y Stalin ordenó la invasión de lo que quedaba de Polonia.  Fue incorporada Prusia Oriental al territorio alemán desapareciendo el corredor de Danzig.  Stalin preparó entonces la invasión de Finlandia que se inició el 30-9-1939, y que terminó con la anexión de Carelia y la ocupación de Hangó que serviría de base naval a los rusos.  Continuando con la ejecución de la cláusula secreta, en el verano de 1940 la URSS ocupó Estonia, Letonia y Lituania y forzó a Rumania que le cediera Besarabia y Bucovina del norte.
Esa aproximación de la URSS a Europa Occidental no fue del todo del agrado de Hitler ni de Mussolini y entonces, a pesar del Pacto de No Agresión, y de acuerdo con los planes que Hitler había formulado en Mein Kampf, planificó la invasión de la Unión Soviética cuyo primer plan se dibujó el 5 de agosto de 1940.  Stalin fue informado de ello pero no creyó en la seriedad del proyecto.  Sin embargo, debido a los persistentes rumores, el 10 de abril de 1941 fue puesto en estado de alerta el Frente occidental soviético.
El 01 de junio de 1941, el Ejército Rojo contaba en los sectores militares occidentales con un total de 36 divisiones acorazadas, 18 motorizadas, 7 de caballería y 88 de cazadores.  Alemania movilizó antes de 22 de junio de 1941, 7 Ejércitos y 4 Grupos de Ejércitos acorazados; 17 divisiones acorazadas, 12 motorizadas, una de caballería, una de montaña, 81 de infantería y 8 de tropas de seguridad del estado.  A esos efectivos se añadieron como reserva otras 26 divisiones (2 acorazadas, una motorizada, una de montaña y 22 de infantería).  En total, 3 millones de soldados alemanes con 600.000 vehículos, 750.000 caballos, 3580 blindados, 7184 cañones y 1830 aviones.
Una vez iniciada la invasión, el ataque alemán, con la participación de Rumania, condujo en poco tiempo a notables éxitos iniciales.  A partir del 23 de junio fueron incorporándose a las tropas atacantes, las de Eslovaquia, Finlandia (26 de junio) Hungría (27 de junio).  El 12 de julio Gran Bretaña y la URSS establecieron un pacto sobre cooperación en la lucha contra Alemania y ambas partes se obligaron a no sellar jamás una paz por separado con el agresor.  El 2 de agosto de 1941, comenzaron los envíos de ayuda americana a la URSS, aún cuando EEUU no había entrado en guerra todavía.  Los Ejércitos Norte, Centro y Sur alemanes continuaron avanzando en dirección al Este, cruzaron la Línea Stalin en julio y batieron a los Ejércitos soviéticos en varios cercos (Uman, Kíev, Bryansk y Vyazma).  El 6 de noviembre, Stalin comunicaba las bajas soviéticas: 350.000 muertos, 378.000 heridos y más de 1.000.000 de desaparecidos.   Fracasó un intento alemán de conquistar Moscú.   El contraataque soviético, con refuerzos llegados de Asia Oriental y de sus Aliados, y gracias al invierno especialmente duro que diezmó a las tropas alemanas, no preparadas para la estación, condujo a graves derrotas de los alemanes y a pérdidas de terreno de manera inexorable.

6º ejército alemán


El 6º ejército fue un ejército alemán que participó en la Primera y Segunda Guerra Mundial. Este ejército es conocido por haber sido rodeado y destruido en la batalla de Stalingrado por el Ejército Rojo.
Años de Actividad: 
1914--1918
1939--1943
1943--1945

Principales Comandantes:
-Rodolfo de Baviera
-Otto von Below
-Walther von Reichenau
-Friedrich Paulus 

Principales Batallas:
- Primera Guerra Mundial:
· Frente Occidental
- Segunda Guerra Mundial:
· Batalla de Francia
· Operación Barbarroja
· Operación Azul (destruido)

Primera Guerra Mundial

-En agosto de 1914, el Príncipe heredero de Baviera, Rodolfo de Baviera, recibió el mando del 6º Ejército, compuesto por tres cuerpos baváros, un cuerpo prusiano y un cuerpo baváro en la reserva.
-El General Krafft von Dellmensingen fue nombrado Jefe de Estado Mayor del 6º Ejército.
-Esperando una ofensiva francesa en Alsacia y Lorena, el Plan XVII, se designó al 6º y al 7º Ejércitos a proteger el flanco izquierdo del frente. 
-Se le ordenó al Príncipe Rodolfo contener la ofensiva francesa en su sector, mientras que los otros ejércitos participaban en el Plan Schlieffen, pero éste persuadió al Mariscal Helmuth Johan von Moltke de ejecutar una contraofensiva.
-La ofensiva francesa en Lorena se inicio el 14 de agosto de 1914, cuando el 2º Ejército Francés, comandado por el general Noël de Castelnau, se acercó a Sarrebourg.
-El 20 de agosto, la contraofensiva alemana se inició, y los franceses tuvieron que retirarse al exponerse su flanco derecho. 
-El 6º Ejército intentó capturar Nancy, cruzando la frontera de aquella época, no obstante, fueron detenidos. 
-Una limitada ofensiva alemana fracasó, pero los franceses suspendieron el Plan XVII. 
-El 6º Ejército participó en la Primera Batalla de Ypres, siendo el flanco izquierdo del ataque contra la Fuerza Expedicionaria Británica que protegía Ypres. Desde entonces, este ejército protegió el sector al sur de Ypres, conteniendo varios ataques británicos, iniciados con la batalla de Neuve Chapelle, pero sufriendo importantes bajas.
- Los soldados de esta unidad fueron víctimas del primer ataque británico con gas venenoso durante la batalla de Loos, en septiembre de 1915. No obstante, el resultado no fue el esperado y la ofensiva aliada se estancó.

Segunda Guerra Mundial

-Después de haber participado en la invasión de Polonia de 1939, el 10º Ejército, al mando del general Walther von Reichenau, fue trasladado al frente occidental el 10 de octubre de 1939, renombrado como el 6º Ejército. 
El general von Reichenau continuó al mando de esta fuerza, con el general Friedrich Paulus como su jefe de Estado Mayor. 
-Hasta el inicio de la batalla de Francia el 6º Ejército estuvo resguardando la frontera alemana alrededor de Cléveris.
-Los Aliados enviaron un escuadrón de bombarderos a destruir los puentes en manos alemanas, pero la defensa anti-aérea del 6º Ejército y la Luftwaffe frustraron sus planes.
-Los aliados consideraron que el ataque del 6º y 18º Ejércitos a través de Bélgica y los Países Bajos consistían el grueso del ataque alemán, y las enormes distancias cubiertas por la infantería de von Reichenau en poco tiempo convencieron los oficiales aliados de que esta fuerza enemiga contaba con el grueso de los tanques. 
-Las fuerzas del 6º Ejército recibieron la orden de sostener fuertes combates con la línea defensiva aliada en el Dyle, orden que fue ejecutada éxitosamente los primeros días.
El 13 de mayo el general Franz Halder, jefe del Estado Mayor, escribió en su diario:

"Al norte de Namur hemos contabilizado una concentración de unas 24 divisiones británicas y francesas, y unas 15 divisiones belgas. Contra esto, nuestro 6º Ejército tiene 15 divisiones en el frente y 6 en la reserva... Somos lo suficientemente fuertes allí para repeler cualquier ataque enemigo. No hay necesidad de traer refuerzos.

La confianza alemana ante la superioridad numérica enemiga no sólo radicaba en la calidad de las tropas, sino en el plan de ataque alemán, ya que en esos momentos el Grupo de Ejércitos A, con el grueso de los tanques alemanes, estaba cruzando las Árdenas para cortar las líneas de comunicación y abastecimiento aliadas. En efecto, cuando los aliados detectaron que las fuerzas del 6º Ejército no poseían el grueso de los tanques, el grupo que cruzaba las Ardenas estaba cruzando el río Mosa por Sedán. 
 

-El Jefe de Estado Mayor del 6º Ejército, Teniente General Friedrich Paulus, fue enviado a la OKW para que participase en la planificación de la Operación Barbarroja, la invasión de la Unión Soviética. 
Fue reemplazado por el Coronel Ferdinand Heim.
Para la invasión de la Unión Soviética, el 6º Ejército Alemán fue asignado al Grupo de Ejércitos Sur, comandado por el Mariscal de Campo Gerd von Rundstedt. 
El 6º Ejército cubría el flanco norte de este Grupo, ya que el 2º Grupo Panzer al norte, pertenecía al Grupo de Ejércitos Centro. 

La invasión inició el 22 de junio de 1941, y la acción del 6º Ejército en la etapa inicial fue limitada a abrir una brecha en la línea defensiva Stalin, que fue cruzada por el 1º Grupo Panzer. 
El 5º Ejército soviético logró entonces mantener sus posiciones en el Pripet, y atacó el flanco izquierdo del 1º Grupo Panzer, que debía ser protegido por el 6º Ejército. 
Para el 13 de julio, ambos ejércitos alemanes se encontraban a unas decenas de kilómetro de Kiev, sin embargo, el Frente Suroeste de Kirponos continuó resistiendo en la zona.
En efecto, la captura de Berdičev significó la separación entre el Frente Suroeste y el Sur, y mientras los frentes vecinos retrocedían, se formó un saliente en Kiev gracias a la hábil defensa del 5º Ejército soviético.
El 16 de septiembre, los flancos derecho e izquierdo del Frente Suroeste fueron rebasados, y los 1º y 2º Grupo Panzer atraparon a cuatro ejércitos soviéticos al norte de Kiev, incluyendo al 5º Ejército. 
El 6º Ejército se dedicó entonces a limpiar la bolsa de Kiev de soldados soviéticos, entregando a judíos y a los comisarios políticos a los temidos Feldgendarmerie y a los Sonderkommando.
A finales de septiembre, el 6º Ejército continuó su recorrido hacia el este, intentando alcanzar el Donets. 
La partida del 2º Grupo Panzer hacia la batalla de Moscú, deja al Grupo de Ejércitos Sur con insuficientes tanques para mantener el paso acelerado que llevaban. 
El Frente Sudoeste Soviético fue reorganizado bajo el mando del Mariscal Semión Timoshenko, quien enfocó sus fuerzas en el sur de Ucrania, contra el 1º Ejército Panzer de Ewald von Kleist. 
Más al norte, el 6º Ejército rodeó Jarkov a medidados de octubre, y la Stavka soviética ordenó su inmediata evacuación, aprendiendo del error cometido en Kiev. 
El 24 de octubre, tropas alemanas entraron a la ciudad.
Siguiendo su línea de admiración hitleriana, el 10 de octubre, el General Walther von Reichenau emitió una orden al 6º Ejército, donde les recuerda a sus hombres que su deber es:

"Liberar a los alemanes de la amenaza judío-asiática para siempre."

Para ver el final de este ejercito consultar estos dos vídeos (el primero a partir del minuto 8:00)